Mi interior anda revuelto estos días. Ni es la primera
vez ni será la última, sin duda. Por desgracia.
Me acuerdo del inicio de la película “Another me” (Mi otro yo) de Isabel Coixet:
“Siempre has tenido pesadillas… como si el mundo se acabase…” No se acaba el
mundo, pero me está costando conciliar el sueño… ¿Remordimientos? ¡Quizás! En
todo caso de todo lo que pude evitar y no evité. No sé… Me viene a la mente
otra película de Coixet, creo que fue su segunda película, “Mi vida sin mí” y recuerdo el diálogo madre e hija en el coche… y
aquella espontánea respuesta de la hija: “Nadie es normal”. ¿Será cierto?...
Confieso que a veces lo pienso. Pero no…
Reacciono, me pongo a meditar, oro… Viene a mi mente
tantos momentos… personas, experiencias… que a lo largo de estos último 10 años
he vivido. Mi responsabilidad como Provincial en una institución como La Salle,
centenaria ya, y en la que miles de padres ponen su confianza en nosotros,
TODOS nosotros… no está exenta de fracasos educativos. ¿Aciertos? Sin duda
también y muchos, pero no me quitan el sueño.
A lo largo de estos años me ha tocado intervenir,
acompañar, sufrir en silencio, buscar y clarificar, escuchar… jamás me he
sentido indiferente ante cualquier tipo de sufrimiento. ¡Ni quiero! Soy humano
y punto.
Es verdad, no todas las denuncias por abusos han sido
verídicas. Pero todas me han quitado el sueño. No me gusta frivolizar en estos
temas. Hubiera bastado con una sola, pero desgraciadamente han sido la mayoría.
Y no siempre he sabido reaccionar adecuadamente o estar a la altura de las
circunstancias. También en esto he aprendido, vamos aprendiendo.
Lamentablemente dejando rastros… heridas en el camino.
Lo confieso, una pregunta me ha interpelado en cada
una de esas malditas experiencias: ¿Por qué Señor? No hay respuestas lógicas.
Me acuerdo de unas polémicas declaraciones de la psicopedagoga Laura Gautman a
la que incluso le acusaron de “apología del abuso”, polémica a parte, ella
afirmaba que: “Vivimos dentro de un
cuerpo de adulto pero tenemos organizadas las emociones como si fuéramos niños
hambrientos…” y os lo comparto, siempre me he puesto en lugar de la víctima y, a
pesar de buscar equilibrio, me ha costado vivir la presunción.
Lo reconozco,
sumo y asumo algún error a mi espalda por ello.
Me vienen a la mente canciones como la de Aerosmith
en “Janie’s got a gun” con su
excéntrica música pero con gran carga emotiva: “…todo su mundo se ha venido abajo…
dime que no es cierto… escapa, escapa del dolor… escapa, escapa…” Y más la de Danny López: “Más que una
lágrima”: “… poco a poco tu apagas una esperanza en un pequeño corazón… será tú
quien cargue culpas…. Abrázate a Dios…” Y ES QUE NO TENEMOS REMEDIO. ¿O SI?
Sencillamente porque en muy pocas semanas dos nuevas
situaciones me han tocado el corazón. Una, ya comentada por aquí, referida a
nuestro Colegio de Inca. La otra, en pleno candelero, se refiere al ya ex-prior
de Lluc.
Jalonada por otras en mi querida Mallorca con referencias a la
Parroquia de Selva, a la playa del Mago… y a otros tantos sacerdotes.
Me alegra comprobar como en todos los casos, la
Iglesia de Mallorca en manos de su Obispo Xavier Salinas, ha reaccionado con
prontitud y fidelidad a Roma que, desde Benedicto XVI y, por supuesto, con
Francisco son claros y modélicos en el tema. La Iglesia, lo reconozco, ha sido
capaz de reaccionar ante un tema tan doloroso y complicado como es el de los abusos,
cualquier tipo de abuso, pero especialmente de los más vulnerables, de los que
más indefensos, de los más pequeños… preferidos de Jesús.
De entre todos los perfiles en los que personalmente
he tenido que intervenir, no recuerdo ninguno “aparentemente diabólico”, más
bien lo contrario, todos han sido grandes personas, con muchas cualidades, bien
preparados… cercanos, entregados, comprometidos… por eso, la incredulidad, la
duda razonable o como mínimo la extrañeza, la sorpresa… ha sido la reacción
habitual del entorno inmediato. ¡No puede ser¡ ¡Imposible! Y con frecuencia le
ha acompañado una reacción inquisidora, cuestionadora… a las víctimas, a los
denunciantes, incluso a la misma institución y a veces a mi persona o en quien
delegaba profesionalmente. No olvido la frase de Nietzsche: “El camino hacia el infierno está
pavimentado de buenas intenciones”. Me ha tocado muchas veces pedir perdón
y mil veces que lo haría pero nunca, jamás… nadie lo ha pedido ante la
falsedad. Así es de duro el tema.
Compruebo que esto se sigue repitiendo.
Siempre respetando la presunción de inocencia, he
manifestado que ni soy juez ni psiquiatra. Para ellos su tarea profesional,
nada fácil. Lo único que podemos hacer es facilitarles al máximo su trabajo. Y
así ha sido al menos desde mi experiencia.
Intervenciones del historiador Pere Fullana a quien considero persona sensata y
equilibrada, le comprendo su dolor y le digo que precisamente por respeto y
amor, a nuestra querida Escolanía, “als blavets”, que suma más de 500 años de
historia, la segunda en Europa, lo mejor es el pronto esclarecimiento de los
hechos y posibilitar que la vida siga. Efectivamente, “els blavets teniu cap i
cor”, y lo habéis demostrado la mayoría de quienes formáis parte de esta
familia a la que admiro y respeto.
Al ex-político y empresario, con claros intereses en
Lluc, Pere Muñoz, le digo que efectivamente es imprescindible “aclarir els fets sense preses però sense dilacions es clau…” tal
como lo manifiestas en tu escrito en mallorcadirario.com pero, por favor, los
medios no son “santos y justos” cuando nos favorecen y unos “carroñeros” cuando
me afectan. Y lo digo hoy y siempre porque también he vivido institucionalmente
lo mismo tanto en Mallorca como en Menorca en estos años. Comparto dos
ejemplos:
· En Alaior un psicólogo compartido con la escuela
pública fue apartado por abusos a varios alumnos de la escuela pública pero en
los “medios” sólo aparecían fotos de nuestro Colegio en el cual nada había
pasado, ni nada teníamos que ver.
· En Manacor, en el programa de tv local “de tot i
molt” sufrimos durante horas las acusaciones falsas de abusos en nuestro
colegio por parte de un “profesional” que ni sabía de lo que hablaba. Peor en
todo caso, el mal…
Que hay prensa y medios de todo tipo ¡Sí! Que algún
periódico vive y llena sus páginas de…¡Sí! Que existe anticlericalismo…
¡indudable! Pero, al igual que en el tema que me ocupa, también hay
profesionales serios, como Mateu Ferrer, ningún santo ciertamente como tú y yo,
pero que aún llevando en el corazón cicatrices no curadas del todo intenta
luchar y se compromete dando la cara, lo hace buscando coherencia, contrastando
información, colaborando con la justicia, defendiendo a las víctimas sin negar
ninguna presunción de inocencia… ¡mojándose! Cosa difícil hoy en día si no hay
intereses económicos por detrás como no es su caso. Doy fe de ello. Lo hace dejándose la piel e incluso asumiendo la crítica, que se le niegue el saludo o se le de la espalda. Y si justo es denunciar el "carroñerismo" justo también es reconocer la labor de un buen profesional.
Duele, me duele, que la Iglesia o mi institución que
es parte de ella, salga en los medios sin información contrastada, sin
profesionalidad… como un “Sálvame” cualquiera, pero es justo asumir la
responsabilidad y facilitar el trabajo a los medios con la prudencia necesaria
pues la sociedad tiene derecho a conocer, a saber, a estar informada. ¿O no?
Como todo en la vida, hay que respetar, favorecer, valorar y agradecer a
quienes actúan con coherencia y profesionalidad.
El griego Porfirio afirmaba que “todo se repite una y otra vez”, por desgracia también los abusos.
Parece que no aprendemos o no queremos aprender. Vivimos en mundo cruel porque
nos hemos convertido en seres crueles que ni a prendemos ni queremos aprender
ni de la historia ni de nuestros errores. Pero amo al mundo y lucho por él y en
él.
No pienso que tendremos un mundo mejor... sino que
tenemos el mejor mundo posible. Pretendo hacer algo bueno con mi pecadora vida,
aliviar algo el sufrimiento de otros en lo posible, aportar mi granito insignificante
de arena en lugar de…
Creo que los males del mundo existen porque nos hemos
alejado el alma, se nos ha dormido el alma porque nos hemos identificado más
con el yo, con el ego... y ojala lo cooperativo, lo fraterno, lo cordial, lo
amoroso… ilumine más nuestro camino... pero la vida necesita a veces extraviarse,
caer para levantarse, equivocarse para luego reconocer el camino correcto... lo
malo es cuando ni lo reconocemos ni aprendemos de ello. Y así…
Y así, seguimos dañando, lastimando, destruyendo…
huyendo de lo perfecto, nos dirigimos
por presuposiciones, percepciones muchas veces erróneas, imágenes petrificadas.
Nos aferramos a aquello que confirma nuestros puntos de vista y no escuchamos.
Necesitamos agudizar el oído y darle martillazo al fantasma que anida en
nosotros para vivir el “ahora” con más plenitud. Creo en la vida y en sus
errores.
Reconocer heridas, sanarlas... en la vida hay perdidas,
hay descuidos, hay durezas, dañamos a otros... hay heridas biográficas, o del
sistema perdidas, traiciones, desamores.... es una tarea del viaje del alma el
mirar las heridas y por ellas utilizarlas como fertilizantes para una vida
buena y no para edificar mas sufrimientos. Confucio decía: "Una herida no es gran cosa excepto por el hecho de que nos
empeñamos por recordarla". Por eso reclamo la dimensión de la
hondura, de la profundidad, el viaje del alma... reconocer nuestros dones y
asumirlos como préstamos que la misma vida nos regala, son legados de recursos
que no elegimos pero sí entregamos... y nos hace sentir mejor. A pesar de
extravíos e incoherencias.
Mis pesadillas, siguen ahí. Pero quiero caminar y no
me conformo en lamer heridas. Y si hay que perdonar, perdonaré. Yo.
Opto por la vida, defiendo la vida, amo la vida… ¡de
todos!
¿SOY NORMAL?
Abrazos sostenidos
Puerto Príncipe
No vos conec absolutament de res, pero dir que tenc clars interessos a Lluc es molt pervers i injust. No se q insinuau amb clars interessos. Jo mai m'atreviria a desacreditar eis germans de la Salle dient que tenen clars interessos en l'educacio. Els germans de La Salle poden guanyar molts de doblers amb les seves escoles pero no ho fan nomes per guanyar doblers.
ResponderEliminarEl dia q vulgueu vos puc explicar q faig a Lluc pero insinuar que defens el Prior xq hi tenc interessos es molt desencertat, vos ho assegur.